Page 128 - Historia "nobelada" de la Genética
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Por mismidad genética se entiende la condición genética de ser uno mismo o por la

               cual se  es uno mismo.  Es  equivalente  a  identidad  genética,  concepto relacionado  con la
               capacidad  genética del  organismo de distinguir  lo  “propio” de lo “extraño”. De  lo dicho

               anteriormente se desprende que el concepto de identidad o mismidad genética depende,

               por lo tanto, de las proteínas de las clases I y II codificadas por los respectivos genes del
               sistema  principal  de  histocompatibilidad  (MHC).  En  otras  palabras,  el  “documento  de

               identidad” o las “señas de identidad” genéticas de un individuo están escritos en los genes

               de su sistema HLA. Ello justificaría, tal como se ha indicado antes, su elevado polimorfismo.

                      Todo  lo  dicho  nos  lleva  a  plantear  la  cuestión  de  cuándo  en  el  desarrollo  del

               individuo se actualiza su identidad o mismidad genética. Es decir, aunque el genotipo del
               cigoto incluye ya, obviamente, el sistema HLA con un haplotipo (genotipo) determinado, sin

               embargo, su actualización no se hace efectiva hasta que los genes que contiene se expresen

               (transcripción)  y  se  sinteticen  (traducción)  las  proteínas  correspondientes.  En  ese
               momento podría decirse que quedan fijadas las “señas de identidad” del individuo. Estas

               cuestiones pueden tener trascendencia cuando se discuten las consideraciones genético-

               biológicas  sobre  el  desarrollo  embrionario  humano  y  la  individualidad  del  nuevo  ser
               humano (Lacadena, 1995c). No cabe duda que el título de la Conferencia Nobel de Burnet

               en 1960 -”Immunological recognition of self”- resulta premonitorio. Para una biografía de

               Sir Frank Macfarlane Burnet ver Sexton (1992).

                      En el contexto de la inmunogenética fue de enorme importancia el descubrimiento

               en 1983 del virus de la inmunodeficiencia humana VIH (HIV, si se utiliza el acrónimo
               inglés)  por  parte  de  Françoise  Barré-Sinoussi  y  Luc  Montagnier,  solamente  dos  años

               después de que se hubieran disparado todas las alarmas ante la pandemia del síndrome
               de la inmuno deficiencia adquirida conocido como SIDA (AIDS, si se utiliza el acrónimo

               inglés); descubrimiento que les valió el Premio Nobel en Fisiología o Medicina 2008. Con

               tal motivo, me referí a los avatares de la controversia del descubrimiento con el siguiente
               título “El virus de inmunodeficiencia humana: deshaciendo el nudo gordiano” (Lacadena,

               2009) que me permito incluir a continuación:

                      Hace unos años escribía yo un comentario sobre los “Fraudes científicos: Ética de

               la investigación” en el que recogía las siguientes palabras (Lacadena, 2006):

                      “En la década de los ochenta del siglo pasado, fue muy notable la controversia establecida

                      entre el Dr. Robert Gallo, del Instituto Nacional del Cáncer en Bethesda, USA, y el Dr. Luc

                HISTORIA “NOBELADA DE LA GENÉTICA” (1900-2016)                                        128
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