Page 43 - Historia "nobelada" de la Genética
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propio Sharp ha seguido interesado (Sharp, 1981, 1985, 1987, y su propia Conferencia
Nobel).
Precisamente, el estudio de cómo podría producirse la rotura y empalme les llevó a
Thomas R. Cech en 1981 y a Sidney Altman en 1983 a demostrar la actividad catalítica del
ARN: el primero estudiando el proceso de maduración del ARN ribosomal (ARNr) del
protozoo ciliado Tetrahymena thermophila (Cech et al., 1981; Kruger et al., 1982; Zaug and
Cech, 1986) y el segundo demostrando que el componente ARN de la ribonucleasa P es la
subunidad catalítica responsable de la escisión de parte del ARN en el proceso de
maduración de la molécula de ARN transferente en la levadura (Guerrier-Takada et al.,
1983; Altman et al., 1986). En 1989, Altman y Cech recibieron el premio Nobel de Química
“por su descubrimiento de las propiedades catalíticas del ácido ribonucleico (ARN)”. Aquí
podría resaltar que los resultados de ambos investigadores estuvieron en su día en contra
del “orden científico establecido” (el establishment científico) –como lo fue en su tiempo la
identificación del ADN como material hereditario frente a las proteínas- puesto que hasta
entonces la actividad enzimática era una exclusiva de las proteínas.
Finalmente, en relación con el nuevo modelo estructural de gen discontinuo, y
teniendo en cuenta que se han descrito fenómenos de splicing alternativo y de trans-
splicing, queda en entredicho la idea genética fuertemente arraigada de un gen o un cistrón
– un polipéptido frente a la posibilidad de un cistrón – varios polipéptidos o varios cistrones
– un polipéptido. Todo ello hace más difícil la definición de gen.
b) La traducción.
En 2009, Venkatraman Ramakrishnan, Thomas A. Steitz y Ada E. Yonath recibieron
el Premio Nobel en Química “por los estudios sobre la estructura y función del ribosoma”
en la traducción. Como resaltaba la propia institución Nobel al hacer público el premio, el
ADN y el ARN son moléculas portadoras de la información genética, pero con ellas solas
no habría vida porque son las proteínas las que construyen y controlan la vida. Es en los
ribosomas donde se produce la síntesis de las proteínas.
El ribosoma bacteriano (70S) es una ribonucleoproteína que consta de dos
subunidades, grande (50S, 1.500.000 Da) y pequeña (30S, 800.000 Da). La subunidad
grande (50S) está constituida por unas 33 proteínas diferentes y por dos moléculas de
ARN (ARNr 23S, 2.900b y ARNr 5S, 120 b) y la subunidad pequeña (30S) esta formada por
HISTORIA “NOBELADA DE LA GENÉTICA” (1900-2016) 43