Page 116 - Anales 2-2 -2017
P. 116
No obstante, como Deaton nos recuerda en su mencionada “The great
escape...” no hemos de olvidar que la vida en estos tiempos es bastante mejor que
en cualquier otro momento de la historia. Hay un mayor número de personas más
ricas, y son menos las que viven en pobreza extrema. Y a pesar de que tras años de
crisis, vivimos momentos puntuales de incertidumbre, con guerras, movimientos
masivos de refugiados y otros conflictos que no conocíamos desde la Segunda
Guerra Mundial, podemos disfrutar de una vida razonablemente mejor que en
muchos momentos anteriores. (25)
3.2. FOMENTO DE ESTUDIOS SOCIALES Y SOCIOLOGÍA APLICADA
(FOESSA)
Lo cual no obsta, para que, añadimos nosotros, sigamos manteniendo una
tensa preocupación porque el proceso de mejora de la igualdad entre los
ciudadanos emerja sobre algunas cuestiones de las que aquí se han observado.
Entre las que destacamos algunas de las que nos recuerda Gualdione en un trabajo
recientemente publicado, y en las que en base a aportaciones de docentes
universitarios e instituciones sociales, como Foessa (Fomento de Estudios Sociales
y Sociología Aplicada), llega a concusiones de gran interés:
a) Superar la vieja concepción de los términos renta y riqueza que nos
impiden conocer la verdadera situación de nuestra sociedad. Es evidente que la
renta ha crecido de manera significativa en los últimos treinta años. Pero respecto
a la riqueza, es preferible utilizar un instrumento de medida basado en el consumo
de los hogares, como diferencia entre la renta disponible y los impuestos
soportados, que reproduciría el deterioro de aquella en el mismo período.
b) Por otra parte, tanto el Producto Interior Bruto como el PIB per cápita
miden el valor de la renta en el país. Pero deben contemplarse otros indicadores: la
participación de los salarios; la estructura y resultados del sistema educativo; el
montante de las prestaciones y servicios sociales, etc., que permiten acercarnos al
nivel de bienestar de los ciudadanos.
c) La Organización de las Naciones Unidas (ONU) utiliza el Indicador de
Desarrollo Humano (IDH) en el que se incluyen aspectos tales como la duración
de la vida en términos saludables; el desarrollo de una vida digna, el nivel de los
conocimientos, etc., que, para el caso español, nos permite contrastar lo que
venimos comentando: que en dichas tres décadas, la renta creció para el Índice
citado, que evolucionó en España del nivel 34 entre todos los países del mundo, al
nivel 27 en el año actual.
d) Y buena prueba de ello ha sido el deterioro de la población activa, en la
que hemos pasado a una tasa del 45 al 38% en esas tres décadas. Esta magnitud es
esencial puesto que siete puntos básicos de descenso inciden sobre las clases más
desfavorecidas.
e) La conveniencia de afrontar una verdadera reforma del mercado de
trabajo, en la que se considere, aparte de una nueva regulación de la contratación,
regulación salarial, extinción y suspensión de los contratos, etc. así como a superar
238| Rafael Morales-Arce Macías