Page 112 - Historia "nobelada" de la Genética
P. 112
tendría grandes ventajas y tres años más tarde, en otro trabajo fundamental, Evans y
colaboradores demostraron que la inyección de células troncales embrionarias en el
blastocisto de ratón contribuían a la formación de células germinales funcionales y, por
tanto, podían ser usadas para la obtención de ratones quiméricos (Bradley et al., 1984).
El siguiente paso consistió en probar que las células ES podían utilizarse para introducir
material genético en la línea germinal (Robertson et al., 1986). Un año más tarde, Evans y
colaboradores (Kuehn et al., 1987) introducían en células ES mediante infección con
retrovirus el gen mutante para la hipoxantina fosforribosil transferasa (HPRT ) presente
en el síndrome de Lesch-Nyhan, generando un ratón quimérico y en su descendencia
ratones transgénicos portadores de la enfermedad. Como señala Hansson (2007), era el
primer modelo animal de enfermedad humana creado por manipulación genética de
células troncales embrionarias. Hay que señalar que, de forma simultánea, otro grupo de
investigación obtenía también ratones deficientes para HPRT procedentes de una
deleción espontánea producida en un cultivo de células ES (Hooper et al., 1987).
Podría decirse que el paso efectivo a la tecnología knockout se dio cuando Evans y
colaboradores en su publicación de 1987 antes mencionada (Kuehn et al., 1987) dicen,
citando las investigaciones de Capecchi (Thomas et al., 1986) y de Smithies (Smithies et
al., 1985), que “puede ser eventualmente posible producir alteraciones específicas en
genes endógenos por medio de recombinación homóloga con copias clonadas
modificadas in vitro”. Efectivamente, ese mismo año 1987 el grupo de Smithies utilizaba
por vez primera la recombinación homóloga para corregir (por sustitución homóloga) la
−
mutación HPRT (que era una deleción) en un cultivo de células ES seleccionando las
células en un medio HAT que requiere la actividad enzimática HPRT (Doetschman et al.,
1987). Asimismo, Thomas y Capecchi (1987) introdujeron el gen de la resistencia a
neomicina en un exón del gen HPRT en células ES, demostrando que en el cultivo se
podían seleccionar células que habían perdido la actividad HPRT pero ganado la actividad
neo de resistencia a la neomicina, señalando que “esta combinación de usar células ES
r
como línea celular receptora y la mutagénesis sede-específica obtenida por
recombinación homóloga (gene targeting) proporcionará los medios para generar
ratones de cualquier genotipo deseado”. Además, delineaban la estrategia a seguir en el
futuro: “una ventaja de este escenario es que la primera generación quimérica será
normalmente heterocigota para la mutación sustituida (targeted) y que la siguiente
HISTORIA “NOBELADA DE LA GENÉTICA” (1900-2016) 112